Juzgan a un hombre acusado de violar en tres ocasiones a su expareja sentimental y amenazarla de muerte.
La pareja finalizó la relación y dejó de convivir en agosto de 2020. Poco después, en septiembre del mismo año, procesado y víctima quedaron para intercambiar unas llaves. En el encuentro, el hombre le dijo a la mujer que subiera a su furgoneta para ir a tomar algo, a lo que la víctima accedió.
Sin embargo, según sostiene la Fiscalía, el procesado fue hasta un lugar apartado donde la amenazó con pegarle un tiro y la forzó sexualmente.
La situación se repitió ese mismo día y al día siguiente, cuando el encausado siguió por la calle y la obligó a subirse al vehículo.
La acusación pública solicita una pena de prisión de 39 años por tres delitos de violación, dos de amenazas y uno de maltrato en el ámbito familiar.
