El alcalde de València ha hecho este viernes un llamamiento por la paz en Ucrania. En el aniversario de la invasión del país por el ejército ruso, que ha derivado en un conflicto bélico que suma ya miles de víctimas y millones de personas desplazadas, Joan Ribó ha destacado la acogida del pueblo valenciano que, desde el primer momento, se ha volcado en ayudar a la población refugiada ucraniana.
El alcalde ha encabezado el minuto de silencio que ha realizado la corporación municipal esta mañana ante la puerta principal del Ayuntamiento en solidaridad con la población ucraniana y las personas desplazadas por la guerra.
Miembros de prácticamente todos los grupos políticos municipales se han sumado a este acto de denuncia y solidaridad, que ha contado también con representantes de entidades profesionales y ciudadanas.
El alcalde, Joan Ribó, ha subrayado su “apuesta decidida por la paz”, y ha recordado que “el Ayuntamiento de València se ha volcado en ayudar y atender a las personas que han llegado a la ciudad huyendo de la guerra”. De hecho, ha subrayado Ribó, “somos una de las ciudades, por no decir la primera, que más personas ha ayudado y está ayudando”.
“Pero este es el momento de reclamar que trabajemos para conseguir la paz”, ha reiterado el alcalde, quien se ha sumado “a las declaraciones que han efectuado también en este sentido desde Naciones Unidas, al Papa y muchas instituciones internacionales”. “La solución no es continuar la guerra –ha afirmado el primer edil- la solución es trabajar por la paz; y el camino para llegar a ella siempre es buscar acuerdos mínimos y propiciar un alto el fuego”.
Ribó ha señalado también la difícil situación que viven los millones de personas desplazadas. Según los datos oficiales, en el aniversario de la invasión de Ucrania, el conflicto ha dejado ya un total de 18.955 víctimas civiles y más de ocho millones de desplazados. “No podemos continuar mucho tiempo más en esta situación; hemos de incidir en que la guerra produce muertos, produce mucho dolor y produce destrucción; y eso es algo intolerable que hemos de detener”, ha concluido el alcalde.
