Con el objetivo de crear un parque de alquileres sociales de viviendas que cubran las necesidades de un mercado inmobiliario complejo y carente de pisos a precios asequibles, la Concejalía de Vivienda del Ayuntamiento de Castelló recuerda una de las medidas de su paquete para favorecer estos alquileres.
En este caso, como ya se anunció, la medida consistirá en la bonificación de un 95 % en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las viviendas de pequeños propietarios que mantengan vacías y que las cedan para al alquiler a precios protegidos.
Un aliciente más para aumentar “la cifra de alquileres a precios asequibles ante la necesidad social existente”, como apunta la concejala de Vivienda, María Jesús Garrido. “Por un lado aumentaremos el IBI un 50 % a las viviendas vacías de grandes propietarios para intentar que las saquen al mercado a costes razonables, y por otro, bonificaremos los pisos de pequeños propietarios que los tienen sin habitar si los destinan a la bolsa de alquiler municipal a un precio máximos”, ha añadido.
Incentivos para “querer entrar el alquiler municipal”
Esta medida se implementará a través de la nueva bolsa de alquiler municipal. La concejalía ha modificado las bases de la misma para dinamizarla y para ello ha introducido incentivos para propietarios como la citada bonificación del IBI, un pago anual de 1.500 euros, ayudas de hasta 4.000 euros para realizar reformas y un depósito de hasta 3.500 euros para hacer frente a daños y desperfectos. El precio máximo del alquiler establecido será de 4 euros por metro cuadrado.
Las Concejalías de Hacienda y Vivienda han iniciado los trámites para elaborar un censo de viviendas vacías para localizar las de grandes tenedores con el objetivo de cobrar el recargo en 2022.
