Aunque oficialmente nadie afirma nada con rotundidad, fuentes cercanas a los operarios de varias empresas de construcción que trabajan actualmente en un emergente polígono de Onda con bastas parcelas y varias naves alzando cimientos, parecen dar por sentado que uno de esos espacios “va para los de Amazon”. Por su parte, el ayuntamiento de la localidad, preguntado al respecto por Actualitat Valenciana, “ni confirma ni desmiente nada”.
Con todo, las ofertas de varios municipios ofreciendo grandes espacios en todo tipo de terrenos, desde grandes parcelas en zonas en expansión hasta terrenos que incluso tendrían que ser recalificados como suelo industrial para poder ser reclamo del gigante de la logística, siguen creciendo.
Si Vinarós, Almenara, Orpesa o Torreblanca, entre otros, tomaron la delantera en la carrera por atraer la macroinversión, el goteo de propuestas parece no cesar. Sin embargo, sorprende también ver como otros grandes municipios, con posibilidades de proponer ubicaciones interesantes mantienen silencio o quizás, extreman la discreción en sus posibles estrategias.
De hecho, hoy mismo, el portavoz del equipo de gobierno en la capital de la Plana, preguntado al respecto, afirmaba “desconocer lo que Amazon necesita” y añadía que desde el ayuntamiento de Castelló, estaban “intentando contactar”. Un hecho que choca un tanto con la postura del ayuntamiento de Borriana, por ejemplo, que reconoce a Actualitat Valenciana que el tema “se estudió hace unas semanas para ver si el municipio tenía la posibilidad de poder ofrecerle algo atractivo” pero que lo descartaron “por no tener un espacio tan grande y en las condiciones que la empresa lo necesitaba”.
La confidencialidad y el fantasma de Ikea
De momento, aunque la posible decisión que podría haber tomado ya la conocida firma internacional, ninguna fuente la confirma, son muchos los operarios que trabajan en los terrenos del macropolígono de Onda y que afirman lo mismo porque, dicen, “lo han oído”. Pero al margen de que pudiera tratarse de una ‘fake news‘ interesada, por otro lado, la Comunitat Valenciana, y en especial algunos municipios ya tienen la experiencia pasada de ver como es el trato y la negociación con ‘los grandes monstruos de la economía’ en especial cuando imponen ciertas cláusulas de confidencialidad en sus negociaciones y transacciones.
Solo hace falta echar la vista unos años atrás para ver lo que pasó con el gigante del mueble, Ikea, y su ubicación en tierras valencianas. Muchas cábalas, demasiados anuncios públicos y finalmente una decisión que hizo migrar a otra provincia las esperanzas de decenas de municipios y cientos de personas.
