La ampliación del Puerto de València siempre ha generado controversia. Sin embargo, parecía que el conflicto tenía fecha de caducidad, pues ayer, 31 de marzo era el último día para que Puertos del Estado, que depende del Ministerio de Transportes, emitiera un informe técnico que dijera si es válido o no el anteproyecto que tiene paralizada toda la operación. No obstante, el día ha pasado y la Autoridad Portuaria de València (APV) no ha recibido nada. La decisión, por tanto, se pospone de nuevo.
Y es que, esta decisión lleva alargándose mucho tiempo, en un vaivén de alusión de responsabilidades que ha ido pasando la decisión de unos a otros hasta llegar al Estado. El Coronavirus también ha influido, pues su irrupción en escena a principios de 2020 hizo que la cantidad de mercancía descendiera drásticamente en casi 10 millones de toneladas menos en el mar valenciano, lo que dejó la ocupación del puerto en un 73%.
Si la mercancía no crece al ritmo al que se preveía, “¿para qué ampliar el puerto?” dicen desde las asociaciones ecologistas como Ecologistes en Acció, pero de momento nada frena la expansión, simplemente se va alargando la fecha.
El informe técnico que esperan desde APV serviría para aclarar las dudas acerca de si la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), que tuvo su fecha de de caducidad en diciembre de 2019 serviría o sería necesario pedir una nueva. De pedir una nueva, con la consciencia medioambiental que hay hoy en día en comparación con el año en el que se aprobó, 2007, provocaría un cambio muy sustancial en la ampliación.
“No hemos recibido respuesta aun desde el Ministerio pero entendemos que con los festivos, teniendo en cuenta que la semana pasada hubo puente en Madrid, es algo normal”, le resta importancia Vicent Palací, jefe de prensa de la APV. No obstante, otras fuentes apuntan a que este informe no será una solución definitiva, pues podría recaer la decisión de nuevo en la Comunitat. ¿Hasta cuándo permanecerá en stand by la ampliación del puerto de València?
