Con un primer discurso parcialmente bilingüe y en el que ha reiterado algunos de los objetivos ya marcados en campaña, Begoña Carrasco, se ha convertido en la nueva alcaldesa de Castelló con el único apoyo de su agrupación, tras no llegar a un pacto con Vox que, no ha dudado en recriminárselo en su primer discurso público.
En este pleno de investidura y de constitución del nuevo ayuntamiento de la capital de la plana donde han tomado posesión de sus cargos, los 27 concejales, la flamante primera edil ha insistido en sus objetivos de “hacer sentir de nuevo a los castellonenses, orgullosos de su ciudad”, tras recoger la vara de mando. Un hecho que se ha producido al ser la fuerza más votada, dado que, como era previsible cada grupo político ha votado a su propio candidato y por tanto no se ha dado la mayoría absoluta.
Con los puntos álgidos propios del protocolo de un tan estudiado como este, ha ido transcurriendo una sesión que se iniciaba con la constitución de la mesa de edad y que daba paso después a los juramentos o promesas de los miembros de la nueva corporación para que estos pudieran después votar a sus candidatos.
Constitución y biblia en las promesas y juramentos ‘en castellano y valencià
En cuanto al momento de la toma de sus cargos, en las fórmulas y formas ha habido como siempre variedad. Los ediles de Vox y del PP han jurado y lo han hecho sobre la biblia y en cuanto al lenguaje escogido, entre los populares, Vicent Sales, ha sido el primero en hacerlo en valenciano.
En cuanto a los concejales del PSPV todos han optado por prometer su cargo sobre la Constitución y en el caso de los tres representantes de Compromís que también han optado por la formula de la promesa y en valenciano, dos de ellos han añadido la muletilla “per imperatiu legal”, y que uno de ellos ha apostillado justo antes de la frase que hace referencia a la monarquía. Cabe recordar, que se trata de una fórmula única y estipulada que han de cumplir como requisito inexcusable quienes ostenten un cargo público político.
Tras esto, se ha producido la votación a los cuatro candidatos presentados, uno por cada partido, y el recuento de votos para ofrecerle posteriormente la alcaldía a Begoña Carrasco cono número uno de la fuerza más votada en las elecciones municipales.
Las primeras intervenciones de los grupos políticos
Respecto a las intervenciones de los diferentes grupos políticos, quizás la más reseñable en cuanto al enfado que ha demostrado y a la dureza de sus palabras ha sido la de Vox, en la que ha acusado a la nueva alcaldesa de “asaltar”, aunque legítimamente, ha puntualizado, el consistorio y le ha afeado que no haya pactado con ellos. Una intervención que minutos después, y ya fuera del consistorio, la flamante nueva alcaldesa ni siquiera se paraba a valorar priorizando la grandeza de este día en cuanto a lo que implica para Castelló.
De hecho, poco o nada han aportado las palabras del cabeza de lista de la ultraderecha, Antonio Ortolá quien ha llegado a acusar a Carrasco de “anteponer sus intereses personales basados en la ideología delirante y ruinosa de la izquierda para asaltar este consistorio”, algo que, insistido, “no le han pedido sus electores”.
Un primer discurso que de continuar en esos términos de ataque, quizás pueda marcar, aunque de la forma no esperada, las afinidades o puntos compartidos del actual equipo del PP a la hora de buscar apoyos en su gobierno en minoría.
Por su parte, desde el PSPV, José Luís López ha asegurado que durante los últimos 8 de gobierno del PSOE se ha transformado la ciudad y se deja “una ciudad con proyección económica, moderna, generadora de oportunidades, inclusiva y más solidaria y sostenible”. Sin embargo, también ha mostrado su desconfianza en que la falta de acuerdo de hoy del PP y Vox no sea más que una puesta en escena asegurando que “más pronto que tarde anunciarán su pacto de gobierno con Vox y las líneas rojas no tardarán mucho en ser sapos que tragar”.
En cuanto a las palabras de Ignasi Garcia, el portavoz de Compromís se ha mostrado firme y contundente y ha indicado que “la democracia y sus valores corren peligro” y ahora “se busca eliminar lo diferente y la diversidad”. Por eso ha insistido en que frente a eso, “su “compromís trabajará para que Castelló siga siendo una ciudad de derechos y libertades”
El primer discurso de la nueva alcaldesa
En su primer discurso, no largo en exceso, en el que ha habido referencia a las canciones de Sabina, a sus compañeros de partido, y a la oposición a la que ha asegurado que le sigue tendiendo la mano, Carrasco ha incidido en la importancia de devolver a los castellonenses el poder sentirse orgulloses de su ciudad, haciendo también mención a la necesidad de ejercer una capitalidad sin olvidar los municipios.
Referencias al consenso, a la libertad. a la apertura a todos y a la no discriminación y menciones también para el crecimiento del mundo empresarial así como para posibles acuerdos en pro del bienestar la ciudad. Nada demasiado concretado ni comprometido pero si una enumeración de cuestiones destacadas para su nuevo mandato como la de devolver la doble denominación toponímica de Castellón y Castelló “para que cada uno lo llame como quiera”.
Un parlamento, que ha cerrado con el agradecimiento a su familia y con el que ha logrado emocionar y conmover a parte de los asistentes, en especial cuando se ha referido a sus hijas, Cayetana y Carmen, y a su marido Alfonso, mientras las cámaras que retransmitían el acto que se seguía en pantallas colocadas en diversos puntos del edificio consistorial y los soportales, se centraban en sus rostros.
La foto del nuevo equipo de gobierno del PP
