Cuando crece el miedo ‘inducido’ o ‘argumentado’ de la posible falta de suministros debido a la insuficiencia de transportistas de mercancías, desde la Asociación Empresarial Castellonense de Transportes de Mercancías (ACTM) alertan de nuevo de este problema, que en la Comunitat Valenciana, se concreta en una carencia que supera los 2.000 profesionales.
Es decir, como reiteraba hoy la secretaria de esta entidad, Lara De Miguel, “solo en la provincia de Castellón, “hay 1160 empresas dedicadas al transporte de mercancías en carretera” y desde ACTM estiman que faltan cerca de 400 transportistas. Una cifra que supera las 2.000 personas en el ámbito autonómico y se acerca a los 10.000 en todo el Estado español.
Además, a esta carencia que, advierten ya, podría “llegar a repetir en España las situaciones de desabastecimiento vividas en el Reino Unido en las últimas semanas por falta de transportistas“, como ya han apuntado estas mismas fuentes, se suma la falta de alternativas viables de transporte.
Dicho de otro modo, la falta de una red viaria adaptada a las necesidades comerciales y mercantiles, reflejada en históricas reivindicaciones como, por ejemplo, el corredor del Mediterráneo, hace que la preocupación crezca en tierras valencianas. Más aún si esto se suma a la prevalencia de determinados sectores claves en exportación y a mercados a los que no siempre se puede llegar por vía marítima.
Formación, capacitación y falta de alicientes
Respecto a los orígenes de esta problemática, que no es en absoluto nueva, pero que ahora se evidencia con las consecuencias en la economía de mercado y de producción de la pandemia, se vuelve a apuntar a “la falta de atractivo de la profesión de transportista”.
Una vez más, el sector del transporte apunta que tanto la complejidad d ela formación, con las distintas capacitaciones y carnés requeridos como las particularidades de unos horarios poco convencionales que implican largas ausencias del domicilio junto con el incremento del los precios del carburante y la repercusión indirecta en unos salarios que no resultan atractivos, se encuentran en el orígen del problema.
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