El incendio declarado el domingo por la tarde en el municipio de Venta del Moro, en la Plana de Utiel-Requena, y que se había dado por estabilizado al mediodía se ha reactivado en las últimas horas y obliga a decretar la situación 2, según ha informado al Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat. El fuego ha quemado ya cerca de 800 hectáreas y ha sido provocado por un rayo, según ha explicado el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, desplazado al puesto de mando avanzado, ubicado en la aldea de Casas de Moya. Los esfuerzos se centran ahora en impedir que el fuego llegue a la reserva natural de las Hoces del Cabriel.
La situación 2 se decreta ante el riesgo de que uno o varios incendios forestales puedan afectar gravemente a la población o bienes de naturaleza no forestal exigiendo medidas de protección o medios extraordinarios.
A lo largo de la tarde se han ido incorporando medios aéreos y terrestres a la lucha contra el fuego, puesto que antes del mediodía se habían retirado algunos porque el incendio evolucionaba favorablemente. Así, según el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel, se han movilizado a todos los efectivos de bomberos forestales de la provincia de Alicante y Castellón, además de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y algunos efectivos de Castilla-La Mancha para que ayuden en las labores de extinción del incendio. Concretamente, desde el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Castilla La Mancha han movilizado 5 medios aéreos y 29 efectivos, según han informado en su cuenta de Twitter.
También los efectivos de la UME están ya trabajando en la extinción de este incendio tan “complicado”, según informó el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, quien se desplazó al puesto de mando avanzado para supervisar el evolución de las labores de extinción del incendio. Con la caída de la luz, se retiraron los medios aéreos sobre las 21:30 h, momento en el que ya no tendrán visibilidad, mientras que las brigadas terrestres continuarán actuando durante toda la noche aprovechando que “las condiciones meteorológicas serán más favorables “por la extinción del fuego y antes de que vuelvan a empeorar mañana sobre las 8:00 h de la mañana, según las previsiones.
Proteger las Hoces del Cabriel
El presidente ha elogiado y agradecido el trabajo de todos los efectivos que están en la zona y ha subrayado la importancia de reducir el perímetro del fuego al máximo durante esta noche, sobre todo el frente que va hacia las Hoces del Cabriel, de un altísimo valor ecológico. De hecho, ahora mismo es allí donde están concentrando más esfuerzos, puesto que se trata de una gran masa forestal y las consecuencias, si el fuego llega, pueden ser devastadoras, ha comunicado el jefe del Consell.
Por su parte, el responsable de Emergencias, José María Ángel, informó de que, pese a que se trazó un perímetro de seguridad para evitar que las llamas lleguen a las poblaciones cercanas al incendio, hubo un momento en la que ha sido necesario evacuar algunas viviendas de Casas de Moya, una pedanía de Venta del Moro. Afortunadamente, el responsable de Emergencias confirmó que, de momento, este peligro ya ha pasado.
Un incendio difícil de extinguir
Tras declararse el incendio sobre las 16:00 horas del domingo, el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat estableció la situación 1 del Plan Especial frente al riesgo de Incendios Forestales (PEIF) y se desalojó la finca agrícola del paraje del Tochar.
Las llamas empezaron en una zona forestal de difícil acceso, situada cerca del kilómetro 34,5 de la carretera CV-455. Esto, junto con las ráfagas de viento, ha complicado las tareas de extinción. Hasta que anocheció trabajaron en el área una docena de medios aéreos, que realizaron alrededor de doscientas descargas. Una cantidad similar de personas luchaban contra el fuego en tierra.
