Expertos en comunicación de la UV analizan cómo Sanitat “maquilló” los datos negativos del COVID en el confinamiento

Aunque la desconfianza en los datos oficiales facilitados, la incertidumbre y sobre todo el fantasma constante de que a la ciudadanía no les estaba llegando “toda la verdad” fue y ha sido una constante desde que se inició la pandemia, ahora, es un estudio de los profesores Joaquín Aguar y Guillermo López, investigadores del grupo Mediaflows, vinculado a la Universitat de Valencia, el que concluye que las comunicaciones que realizó la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública entre los meses de febrero y junio del año 2020 utilizó una “estrategia de comunicación institucional que buscaba resaltar los elementos positivos y emborronar los negativos”.

Según explican, este trabajo, publicado en la revista Dígitos, ha estudiado cien notas de prensa emitidas por la Conselleria de Sanidad desde el 27 de febrero hasta el 8 de junio de 2020 –en los meses de confinamiento estricto al inicio de la pandemia–.

La investigación concluye que, si bien la Conselleria no escondió los datos más relevantes, sí que los “ocultó a simple vista” en las notas de prensa –al no destacarlos– y que los términos que podían referir a aspectos negativos –como “UCI”, “fallecimientos” o “residencias”– solo se utilizaron cuando pudieron hacerlo para destacarlos de forma positiva.

Los investigadores del Departamento de Teoría de los Lenguajes y Ciencias de la Comunicación observan que en los titulares durante los dos primeros meses de la pandemia las palabras que más aparecieron fueron “altas” y “positivos”, mientras que en los meses de mayo y junio lo fueron los términos “fallecimientos, “contagios”, “UCI” y “residencias”, pero siempre en sentido positivo. En los subtítulos encontraron de forma reiterada los términos “positivos” y “altas”.

Preguntas esquivadas y evidencias negadas

Los investigadores encuentran especialmente relevante que, en un momento en el que todos los días había un gran volumen de fallecidos, en las notas de prensa solo apareciera el término “fallecimientos” en los títulos y subtítulos tres días en marzo, uno en mayo y que comenzara a aparecer a finales de mayo para resaltar la ausencia de muertes en la Comunitat debido a la COVID-19. Algo similar ocurrió también con las muertes en las residencias de mayores.

Destaca, también, que los datos de fallecidos fueran proporcionados de forma acumulada por la Conselleria, lo que provocó que en las primeras semanas de confinamiento domiciliario estricto –con periodistas teletrabajando y bajo la presión de los ERTE– algunos medios no dieran cuenta de cuáles eran las cifras reales de fallecidos diarios, aunque este problema se subsanó rápidamente.

De hecho, en las comparecencias diarias de la consellera Barceló, este medio, Actualitat Valenciana, como tantos otros muchos, pudo constatar en más de una ocasión como muchas evidencias respecto a datos objetivos facilitados por sanitarios en primera línea, denuncias de falta de EPI y un sinfín de elementos contrastados periodísticamente eran eludidos o negados por las propias fuentes oficiales que o bien desestimaban contestar o remitían al gabinete de prensa y comunicación con el que en muchas ocasiones era imposible contactar dada la saturación de interrogantes pendientes no resueltos en estas comparecencias que se habían generado y a los que la prensa no recibía respuesta.

Palabras clave

Para afrontar esta investigación, los investigadores de la Facultad de Filología, Traducción y Comunicación aplicaron una metodología de análisis de contenido de los titulares y los subtítulos y un análisis del discurso que tuvo en consideración el resto de las notas de prensa con la evolución de la situación sanitaria de cada momento. Para realizar el análisis de contenido, los investigadores buscaron siete términos que consideraron relevantes para el momento: “fallecimientos”, “positivos”, “contagios”, “altas”, “ingresos”, “UCI” y “residencias”.