La vicealcaldesa y concejal de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, ha anunciado que el Ayuntamiento de València no va a dar ninguna licencia al València CF para que explote el sector terciario del campo, con la instalación de tiendas, locales de restauración o parking, si no respeta la promesa de aforo de 70.000 espectadores. Así lo ha asegurado Gómez en la rueda de prensa convocada este miércoles donde ha explicado que el informe presentado por el club pretende construir un estadio con tan solo 45.573 espectadores, una cantidad “muy inferior” a la que se comprometieron en 2005 la administración valenciana y el Valencia. CF.
En este sentido, ha explicado que el club ha solicitado “un estadio de unos 45.000 espectadores sin museo, sin tiendas o espacios comercio, sin espacio social ni zona de restauración”. Aunque ha afirmado que el club puede empezar el estadio con un menor aforo porque es de su propiedad, pero sin beneficiarse de los derechos urbanísticos del nuevo y viejo Mestalla. Además, sí el club ‘che’ no acabase el campo, entraría en vigor el PAI del viejo estadio aprobado en 2007 y no la ATE.
Por ello, ahora la titular de Urbanismo propone a la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad crear un convenio que condicione el “aprovechamiento” terciario a cumplir con los derechos urbanísticoso acordados, ya que es esta conselleria la que debe pronunciarse sobre si mantiene o no los beneficios urbanísticos que generaría la Actuación Territorial Estratégica (ATE). “Proponemos este marco jurídico que suspende el otorgamiento de licencias de espacios comerciales y terciarios tanto del Nuevo Mestalla como del actual hasta que el club cumpla con los compromisos” ha indicado.
Del mismo modo, la vicealcaldesa ha señalado que el nuevo estadio “no puede ser más pequeño que el actual”, ya que se perderían alrededor de cinco mil espectadores. “Acabar el estadio y acabarlo de cualquier manera o con cualquier tipo de aforo no es cumplir con el objeto ni con el espíritu de la ATE” ha señalado Gómez, que también ha manifestado que se podría “pactar” alguna “matización” en cuanto al aforo, pero que el gobierno del Rialto “no contempla” que se ponga encima de la mesa un proyecto en el que “se pague por igual un estadio peor”.
“Había un objetivo muy claro: acabar un estadio que fuera más grande que el actual, que cumpliera con la normativa nacional e internacional para que permitiera acoger eventos nacionales e internacionales, un estadio cinco estrellas”, ha explicado la vicealcaldesa, quien ha considerado que es “una obligación innegociable” que cumpla las características acordadas.
Entre ellas, según ha detallado, debe incluir un museo del club, una sede social o zonas emblemáticas para el aficionado en las torres contiguas al estadio, además de ejecutar en la zona de les Corts Valencianes medidas correctoras en el plan de movilidad, la urbanización del entorno y la construcción del polideportivo de Benicalap. Mientras que en la zona A, el antiguo Mestalla, se debería seguir con la fase de demolición del estadio y la urbanización del entorno.
Del mismo modo ha manifestado que “si la Generalitat se plantea mantener los derechos del club en el actual Mestalla y en el equipamiento de Cortes valencianas se tienen que mantener las obligaciones y los compromisos, y si no se garantiza no se puede seguir con el planeamiento”. “Si el club cumple, esta ciudad cumplirá” ha matizado.
