Juzgan a un hombre que no notificó la muerte de su madre para cobrar las pensiones de las que era beneficiaria durante 22 años.
La muerte se produjo en marzo de 1985 y, según el Ministerio Fiscal, hasta el año 2016, el procesado envió anualmente a la aseguradora documentos falsos, con los que quería demostrar que la mujer seguía viva. En total, se quedó con 194.500 euros.
La acusación pública solicita una pena de prisión de tres años y medio por un delito continuado de estafa en concurso con un delito de falsedad.
En total se quedó con 194.500 euros y, por estos hechos, la acusación pública requiere para el acusado una pena de prisión de tres años y medio por un delito continuado de estafa en concurso con un delito de falsedad.
