La ética de los periodistas a la hora de abordar las informaciones de la violencia de género pero también el interés empresarial de los responsables de medios de comunicación buscando titulares demasiado escabrosos han sido algunos de los temas abordados hoy de forma autocrítica en el encuentro de comunicadores celebrado en Villa Elisa, en Benicàssim, organizado por adcomunica.
Con la presencia de Maria Angeles Samperio, como periodista y experta en comunicación en igualdad, se han repasado los decálogos y protocolos de tratamiento de las informaciones que ya existen en algunos medios y que pueden servir de modo orientativo.
Como ejemplo, Amperio ha apuntado que la simple elección de la ubicación o etiqueta bajo la que se publican las informaciones, ya supone una declaración de intenciones. Por eso los protocolos escritos ad hoc recomiendan que no se publiquen como sucesos sino en apartados como política o sociedad “dado que se adecua más a la importancia y la repercusión de las informaciones”, ha apuntado.
Samperio: “Una mujer no ha muerto, ha sido asesinada”
Este encuentro de periodistas también ha contado con la presencia de dos agentes de la Guardia Civil, especialistas en unidades de violencia que han compartido sus experiencias y reflexiones. Pero además entre los elementos que se han destacado cuando se abordan las informaciones, con recomendaciones tan obvias como las de proteger la dignidad de las víctimas o no caer en el morbo y las informaciones que desvían, también se ha abordado el poder de las palabras: “una mujer no ha muerto, ha sido asesinada”, ha puntualizado Samperio.
