“Difícil y muy complicada”. Así ha definido el presidente de Confecomerç, Rafael Torres, la situación que está atravesando el comercio de proximidad como consecuencia del encarecimiento de los costes y la inflación, durante la presentación de la nueva campaña bajo el lema “Principios para recuperar los principios”. “Nos enfrentamos a un último cuatrimestre complicado” ha asegurado Torres.
“El pequeño comercio, el de proximidad, por su tamaño sufre una afectación más directa de ese incremento de costes. La inflación es la misma para todos, pero cuando tienes un formato pequeño, los gastos de estructura te afectan de forma más directa” ha indicado el presidente de la patronal del pequeño comercio.
En este sentido, ha señalado que a este contexto, hay que sumarle que el sector todavía “no se ha recuperado de los efectos de la pandemia” y que España es el único país que “no ha alcanzado las cifras de ventas anteriores a 2019, además de los efectos de la guerra de Ucrania, la inflación y los incrementos de costes que “actualmente son difíciles de asumir”.
El presidente de Confecomerç, también ha explicado que a pesar de que agosto “ha sido un mes bueno en ventas, el beneficio no ha sido así” y que muchos hosteleros y comerciantes le han traslado que el incremento de los gastos ha provocado que a pesar de haber facturado más, se hayan quedado sin margen. Por todo ello, ha pedido el “apoyo necesario” a la administración, así como una escucha y colaboración “más activa” entre ambos para “trabajar unidos y en la misma dirección”.
El comercio, el sector con más autónomos y contrataciones de jóvenes
“Nuestro sector representa el 13% del PIB en España, es la primera actividad del sector servicios con mayor representación de autónomos sobre el total de afiliaciones (26,5%), la que ofrece mayor oportunidad a los jóvenes, con una contratación del 55,7% en menores de 30 años, la que cuenta con 211.912 afiliados (dato año 2021), un 2,2% más que en 2020, pese a la crisis tan acuciante que ha soportado el sector” ha defendido Torres.
Una campaña que apela a los principios
Ante esta situación, Confecomerç ha puesto en marcha una campaña para poner en valor la importancia y concienciar lo que significa el pequeño comercio. Bajo el lema “Principios para recuperar los principios”, la patronal ha puesto el acento en el ADN del comercio de proximidad y en potenciar los cuatro conceptos básicos que le diferencian frente a otros grandes formatos: Cercano, humano, fresco y sostenible.
“Esta campaña sigue el hilo de las anteriores hechas anteriormente y pone el acento en la situación actual y el verdadero significado que tiene el pequeño comercio, que siempre ha estado ahí y ahora más que nunca. Es una apuesta segura y una garantía en estos momentos tan complicados que estamos pasando para recuperar los principios que nos han dado seguridad y se han perdido como consecuencia de la globalización”.
Para ello, se han repartido cerca de 10.000 carteles y 290.000 bolsas con una estética moderna, pero que recuerda a un packaging tradicional hace hincapié precisamente en la necesidad de recuperar unos valores que ahora cobran más relevancia que nunca. También se ha realizado un vídeo como eje central de la campaña que resalta los cuatro principios básicos, además de mini vídeos personalizables para los comerciantes y gifs animados para redes o WhatsApp.
Medidas de ahorro energético
En cuanto a las medidas del decreto ahorro energético del Gobierno, el también presidente de la Confederación Española de Comercio (CEC), ha pedido “flexibilidad, sentido común y plazos más largos” porque “se tomaron en agosto deprisa y corriendo” y no fueron dialogadas. Por ello ha pedido que se considere adaptar la temperatura a los 25º en los comercios como plantea el decreto laboral vigente, y no a los 27ºC, ya que no se trata de un “trabajo ligero”.
En este sentido, Torres ha manifestado que el plazo de la medida de instalación de puertas automáticas debería ampliarse porque “tenerlo el 30 de septiembre es inviable”, ya que se deberán cambiar alrededor de 11.000 puertas de comercios en la Comunitat Valenciana y unas 100.000 en todo el país. Además, ha lamentado que las ayudas de la administración tan solo preven una inversión de entre 500.000 euros y un millón, cuando cambiar todas supondría un gasto de más de 25 millones.
