El Partido Popular del ayuntamiento de Valencia ha solicitado desbloquear de forma urgente el PAI de Benimaclet para que los vecinos puedan disfrutar sin más retrasos de los más de 25.000 metros cuadrados de dotaciones y los 50.000 metros de zonas verdes que lleva ese sector.
Para el PP es prioritario poder adelantar el desarrollo urbanístico en esta zona de Benimaclet que contempla más de 400 viviendas de protección pública destinada a alquileres asequibles para gente joven, rentas más bajas, mayores y personas con discapacidad.
“Valencia merece y necesita que se desarrolle ese sector, que se ejecuten las obras de las viviendas de protección pública y que los vecinos puedan disponer de las dotaciones públicas y de las zonas verdes”, ha apuntado el concejal popular Juan Giner Corell.
Asimismo, en el texto de la moción presentada se ha apuntado que es necesario que se excluya del ámbito del Plan Especial del Área funcional 18 el sector de suelo urbanizable de Benimaclet “con la finalidad de agilizar los plazos para el desarrollo del sector al objeto de que el barrio pueda disponer cuanto antes de las más de 400 viviendas de protección pública”.
Por este motivo, los populares piden “desistir de cualquier iniciativa sobre el soterramiento del tramo de la Ronda Norte a su paso por Benimaclet” añadiendo que “de las 400 viviendas (30%VPP) de reserva de Protección Pública, el Ayuntamiento de Valencia se comprometa a destinar el 10% del excedente de aprovechamiento que le corresponde a viviendas sociales”.
En este sentido, el concejal popular ha destacado que “los vecinos de Benimaclet se merecen tener futuro y que siga hacia delante el PAI porque no se merecen el retraso por las luchas entre Compromís y PSOE, que han llevado a un extremo vergonzoso sus posiciones opuestas en este PAI y que en lugar de buscar una solución han convertido a Benimaclet en el epicentro de sus disputas en lugar de ser el epicentro de las actuaciones para dotar al barrio de servicios”.
Por último, ha criticado a Compromís y PSOE “por utilizar como rehenes las dotaciones municipales que necesita la ciudad y sus barrios y utilizar todo lo que tiene en su mano para pelearse entre ellos. Estas guerras que perjudican a los vecinos las pagarán con la derrota en las urnas y su vuelta a la oposición”.
