```
jueves, 25 abril 2024

Información y noticias de la provincia de Valencia

[:es]Alertan de la situación extrema de la UCI del Hospital Doctor Peset por falta de personal[:ca]Alerten de la situació extrema de l’UCI de l’Hospital Doctor Peset per falta de personal[:]

Desde COEV se insta a que se tenga en cuenta la carga de trabajo para que los gestores de la Sanidad pública creen un plan adecuado para cubrir las ausencias de personal de esta unidad.

[:es]El Colegio de Enfermería de Valencia (COEV) pide a la Conselleria de Sanidad que resuelva la dramática situación que viven actualmente las/os profesionales de Enfermería en los diferentes centros clínicos de la Comunidad Valenciana pero, especialmente, en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario Doctor Peset de Valencia. Un problema que se basa en la falta de personal y organización y que afecta a todas las salas que atienden a los pacientes con Covid19.

Los profesionales de la UCI deben trabajar con menos personal del que correspondería por plantilla, dado que no se cubren, oportuna y sistemáticamente, las ausencias de profesionales de la unidad (bajas, permisos, etc.) con el argumento de que en el resto de los servicios no tienen el perfil de UCI.

Desde COEV se insta a que se tenga en cuenta la carga de trabajo para que los gestores de la Sanidad pública tengan en consideración la creación de un plan adecuado para cubrir las ausencias de personal de esta unidad y las del resto de servicios del hospital. En ocasiones, los trabajadores se ven obligados a cubrir las faltas de personal en otros servicios con el consiguiente aumento de cargas de trabajo para el personal que queda en la unidad, atendiendo exclusivamente a criterios de número de camas ocupadas, sin que se atienda las necesidades de los pacientes ingresados ni la posibilidad de que en un momento determinado la asistencia requiera de un importante aumento de recursos de acción inmediata: intubaciones urgentes, paradas, ingresos simultáneos, traslados, etc.

Es de justicia reconocer el sobreesfuerzo de aquellas/os técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) de la unidad que, además de repetir turnos, han debido de formar a compañeras/os en todos aquellos aspectos específicos propios de la unidad, y más en las tan especiales circunstancias vividas durante la crisis COVID. La falta de TCAE es flagrante y requiere de una dimensión adecuada.

De la misma forma, el intento de aliviar la situación aportando refuerzos de personal de otros servicios ha puesto en evidencia la importancia que tiene el conocer y desenvolverse de forma eficiente en determinados servicios, en este caso en la Unidad de Cuidados Intensivos en particular. Pues, a pesar de todo, al igual que ocurre con las/los enfermeras/os, frecuentemente y por indicaciones expresas del equipo responsable de la Enfermería del hospital, se sigue recurriendo a trasladar personal de UCI a reforzar otras unidades, con la mengua de recursos que esto supone para la unidad.

A pesar de que los profesionales han hecho esfuerzos para reclutar el máximo personal con la intención de reforzar la unidad durante la crisis, al ser conocedores de profesionales con perfil (UCI/Críticos) que se ofrecieron para prestar sus servicios y no se tuvo en cuenta su ofrecimiento. Hecho que sigue ocurriendo en la actualidad, a las puertas de un nuevo rebrote.

Por otro lado, desde hace más de un año la UCI viene asumiendo el servicio de Unidad de Terapia Intravenosa con el compromiso firme de mantener el personal asignado a este equipo, sin movilizarlo a otros servicios para poder realizar las tareas propias de esta UTI. Cada vez la demanda es mayor y nuevamente este compromiso no se ha cumplido, y los profesionales se han visto en la necesidad de tener que anular citas y viendo nuevamente nuestra carga asistencial aumentada a causa de una mala gestión.

Las/os profesionales de Enfermería del hospital de la avenida de Gaspar Aguilar sufren, por las circunstancias laborales adversas, una considerable frustración y desanimo y muestran evidentes síntomas de agotamiento físico y emocional. Sobre sus espaldas, ya magulladas, deben soportar el enorme yugo de percibir que nadie ha hecho nada estos meses por mejorar sus circunstancias laborales y las de los pacientes que atienden a diario.

Estas/os enfermeras/os disponen de una larga experiencia en la Unidad de Cuidados Intensivos y, tras haber superado muchos momentos complicados, perciben una gran desprotección y desamparo por parte de la gestión del centro que les afecta tanto a ellos, como empleados de la sanidad pública, como a sus pacientes.

Desde el primer momento están enseñando e instruyendo a los compañeros que han sido contratados para afrontar la Covid-19 en el cuidado y manejo de paciente que se encuentra en Urgencias, Unidades de críticos, Reanimación y Salas de hospitalización. Pero, de forma sistemática, cambian al personal de unos servicios a otros y generan el consiguiente caos organizativo. Porque se requiere una experiencia y formación específica que nosotros vamos a dar ahora por la gran necesidad que se tiene, pero que debe ajustarse a las tareas y las necesidades de los servicios. La especialización es crucial para ofrecer los cuidados.

El presidente del Colegio de Enfermería de Valencia, Juan José Tirado, recuerda que la carencia de personal “es una realidad endémica en la sanidad valenciana y la saturación de los hospitales durante la pandemia se debe principalmente a la baja ratio de enfermeras que hay en la Comunidad Valenciana”. La Ratio-Enfermeras por 100.000 habitantes en Europa es de 852 profesionales, mientras que en la Comunidad Valenciana apenas llega a 520 profesionales.

“Las enfermeras del Hospital Doctor Peset ya vaticinaron a finales del verano lo que iba a ocurrir en las semanas posteriores y reclamaban una mejor gestión para afrontar la segunda oleada de la pandemia. Claro está que llegó la segunda ola y se cumplieron los peores augurios. Nos encontramos ahora de lleno ya en una tercera ola de contagios, en un momento en el que las/os profesionales de Enfermería están devastadas física pero, sobre todo, emocionalmente”, incide Tirado.

El presidente de los enfermeros valencianos anuncia que Desde el COEV “hemos elaborado una batería de propuestas, recopiladas por la experiencia cotidiana de las casi 30.000 enfermeras que trabajan en la Comunidad Valenciana, con las que pretendemos contribuir a la mejora del sistema sanitario. Un decálogo de ideas que persigue fortalecer la maltrecha red sanitaria debido a la pandemia de la Covid-19”.

Entre estas medidas, que pueden aplicarse en el Hospital Doctor Peset, solicitamos traslados puntuales de enfermeras de servicios no saturados como pueden ser consultas externas otros servicios a unidades de Covid que ahora están faltas de personal.

Es importante estudiar una redistribución de personal para atender los espacios clínicos más saturados. Especialmente las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), estas unidades actualmente están desbordadas y precisan más recursos humanos. Por lo tanto, la propuesta sería una revisión de todos los contratados por Covid con experiencia en Reanimación (REA) o UCI y que actualmente están en plantas de menos presión asistencial.

Y, por último, pero no menos importante, que haya una la modificación de la bolsa en su contratación de profesionales por áreas de conocimiento para evitar desaprovechar a las profesionales preparadas en distintas áreas específicas. Una incongruencia que genera una disfunción en el sistema que no ajusta los profesionales a las necesidades reales de personal.[:ca]El Col·legi d’Infermeria de València (COEV) demana a la Conselleria de Sanitat que resolga la dramàtica situació que viuen actualment els professionals d’Infermeria en els diferents centres clínics de la Comunitat Valenciana però, especialment, en la Unitat de Vigilància intensiva (UCI) de l’Hospital Universitari Doctor Peset de València. Un problema que es basa en la falta de personal i organització i que afecta a totes les sales que atenen els pacients amb Covid-19.

Els professionals de l’UCI han de treballar amb menys personal del que correspondria per plantilla, atés que no es cobreixen, oportunament i sistemàticament, les absències de professionals de la unitat (baixes, permisos, etc.) amb l’argument que en la resta dels serveis no tenen el perfil d’UCI.

Des de COEV s’insta que es tinga en compte la càrrega de treball perquè els gestors de la Sanitat pública tinguen en consideració la creació d’un pla adequat per a cobrir les absències de personal d’esta unitat i les de la resta de serveis de l’hospital. A vegades, els treballadors es veuen obligats a cobrir les faltes de personal en altres serveis amb el consegüent augment de càrregues de treball per al personal que queda en la unitat, atenent exclusivament criteris de nombre de llits ocupats, sense que s’atenga les necessitats dels pacients ingressats ni la possibilitat que en un moment determinat l’assistència requerisca un important augment de recursos d’acció immediata: intubacions urgents, parades, ingressos simultanis, trasllats, etc.

És de justícia reconéixer el sobreesforç d’aquelles/us tècnics en Cures Auxiliars d’Infermeria (TCAE) de la unitat que, a més de repetir torns, han hagut de formar a companyes/us en tots aquells aspectes específics propis de la unitat, i més en les tan especials circumstàncies viscudes durant la crisi COVID. La falta de TCAE és flagrant i requereix una dimensió adequada.

De la mateixa forma, l’intent d’alleujar la situació aportant reforços de personal d’altres serveis ha posat en evidència la importància que té conéixer i desembolicar-se de manera eficient en determinats serveis, en este cas en la Unitat de Vigilància intensiva en particular. Perquè, malgrat tot, igual que ocorre amb les/els infermeres/us, sovint i per indicacions expresses de l’equip responsable de la Infermeria de l’hospital, es continua recorrent a traslladar personal d’UCI a reforçar altres unitats, amb la minva de recursos que això suposa per a la unitat.

A pesar que els professionals han fet esforços per a reclutar el màxim personal amb la intenció de reforçar la unitat durant la crisi, en ser coneixedors de professionals amb perfil (UCI/Crítics) que es van oferir per a prestar els seus serveis i no es va tindre en compte el seu oferiment. Fet que continua ocorrent en l’actualitat, a les portes d’un nou rebrot.

D’altra banda, des de fa més d’un any l’UCI ve assumint el servei d’Unitat de Teràpia Intravenosa amb el compromís ferm de mantenir el personal assignat a este equip, sense mobilitzar-lo a altres serveis per a poder fer les tasques pròpies d’esta UTI. Cada vegada la demanda és majorment i novament este compromís no s’ha complit, i els professionals s’han vist en la necessitat d’haver d’anul·lar cites i veient novament la nostra càrrega assistencial augmentada a causa d’una mala gestió.

Les professionals d’Infermeria de l’hospital de l’avinguda de Gaspar Aguilar pateixen, per les circumstàncies laborals adverses, una considerable frustració i desanime i mostren evidents símptomes d’esgotament físic i emocional. Sobre la seua esquena, ja magolades, han de suportar l’enorme jou de percebre que ningú ha fet res estos mesos per millorar les seues circumstàncies laborals i les dels pacients que atenen diàriament.

Estes infermeres disposen d’una llarga experiència en la Unitat de Vigilància intensiva i, després d’haver superat molts moments complicats, perceben una gran desprotecció i desemparament per part de la gestió del centre que els afecta tant a ells, com a empleats de la sanitat pública, com als seus pacients.

Des del primer moment estan ensenyant i instruint als companys que han sigut contractats per a afrontar la Covid-19 en la cura i maneig de pacient que es troba en Urgències, Unitats de crítics, Reanimació i Sales d’hospitalització. Però, de manera sistemàtica, canvien al personal d’uns serveis a uns altres i generen el consegüent caos organitzatiu. Perquè es requereix una experiència i formació específica que nosaltres donarem ara per la gran necessitat que es té, però que ha d’ajustar-se a les tasques i les necessitats dels serveis. L’especialització és crucial per a oferir les cures.

El president del Col·legi d’Infermeria de València, Juan José Tirado, recorda que la manca de personal “és una realitat endèmica en la sanitat valenciana i la saturació dels hospitals durant la pandèmia es deu principalment a la baixa ràtio d’infermeres que hi ha a la Comunitat Valenciana”. La Ràtio-Infermeres per 100.000 habitants a Europa és de 852 professionals, mentre que a la Comunitat Valenciana a penes arriba a 520 professionals.

“Les infermeres de l’Hospital Doctor Peset ja van vaticinar a la fi de l’estiu el que anava a ocórrer en les setmanes posteriors i reclamaven una millor gestió per a afrontar la segona onada de la pandèmia. És clar que va arribar la segona ona i es van complir els pitjors auguris. Ens trobem ara de ple ja en una tercera ona de contagis, en un moment en el qual les/us professionals d’Infermeria estan devastades física, però, sobretot, emocionalment”, incideix Tirat.

El president dels infermers valencians anuncia que Des del COEV “hem elaborat una bateria de propostes, recopilades per l’experiència quotidiana de les quasi 30.000 infermeres que treballen a la Comunitat Valenciana, amb les quals pretenem contribuir a la millora del sistema sanitari. Un decàleg d’idees que persegueix enfortir la malparada xarxa sanitària a causa de la pandèmia de la Covid-19”.

Entre estes mesures, que poden aplicar-se a l’Hospital Doctor Peset, sol·licitem trasllats puntuals d’infermeres de serveis no saturats com poden ser consultes externes altres serveis a unitats de Covid que ara estan faltes de personal.

És important estudiar una redistribució de personal per a atendre els espais clínics més saturats. Especialment les Unitats de Vigilància intensiva (UCI), estes unitats actualment estan desbordades i precisen més recursos humans. Per tant, la proposta seria una revisió de tots els contractats per Covid amb experiència en Reanimació (REA) o UCI i que actualment estan en plantes de menys pressió assistencial.

I, finalment, però no menys important, que hi haja una la modificació de la bossa en la seua contractació de professionals per àrees de coneixement per a evitar desaprofitar a les professionals preparades en diferents àrees específiques. Una incongruència que genera una disfunció en el sistema que no ajusta els professionals a les necessitats reals de personal.[:]

Últimas noticias

Contenido relacionado