Mil kilos de sardinas de toda la provincia esperan a que esta tarde el Grau de impregne con el característico olor de la “Torrà” en uno de los actos más populares de las fiestas de Sant Pere.
Unas 600 barras de pan, 500 litros de vino y alrededor de unos 40 personas entre “torraors”, ayudantes y comisión volverán a repartir este viernes los platos con la ración de sardina recién sacada de la brasa.
“Seremos unos diez o doce torraors, algunos con experiencia pero también hay gente nueva que este año se estrena porque quiere probar”, explica Guillermo Salom Díaz, a Actualitat Valenciana desde la comisión de Festes de Sant Pere.
En cuanto a la participación, las expectativas son muy buenas, Salom apunta que “se podría llegar a los 3.000 o 4.000 servicios porque también con la participación en las paellas mucha gente estira la jornada y se unen luego a la Torrà de la sardina”
De hecho, esta afluencia de público se lleva viviendo durante todas las celebraciones, como destacan desde la comisión del Grau, incluso el mismo presidente, Antonio Tirado, “este año se nota en la participación que la gente estaba esperando y tenía muchas ganas de que por fin llegaran las fiestas”.
“La comisión, sobre todo los más pequeños están muy cansados pero felices. Ha sido muy duro durante dos años decirles, no puede ser, no habrán fiestas, al año que viene, y luego volver a repetirlo, pero puedo decir con orgullo que ningún miembro ni de la comisión mayor ni de los infantiles, ha abandonado y por fin hemos podido celebrar las fiestas niños y niñas que hemos visto crecer”, concluye el presidente.
