Inspección de Trabajo ha abierto una acta de infracción a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y a las subcontratas Covamur y Ballester por una posible “cesión ilegal de trabajadores”. Esta infracción ha sido catalogada por “muy grave” y puede acarrear sanciones económicas de entre 100.000 y 180.000 euros para cada una de las empresas implicadas.
El acta surge a raíz de una denuncia de la sección sindical de CGT a EMT por la externalización de servicios y la subcontratación de trabajadores y “vulnerar” así el artículo 43 del Estatuto de los Trabajadores y tras la visita de un Inspección al centro de trabajo y reuniones “con las empresas infractoras”.
Además del pago de las sanciones económicas, la EMT tendría que liquidar las cuotas a la seguridad social de los trabajadores “cedidos ilegalmente”, derivadas de la diferencia salarial del convenio de las empresas subcontratadas y el convenio de la empresa contratante “con al menos cuatro años de retroactividad” que podría ascender a los 400.000 euros.
“La intención de CGT nunca ha sido que se sancionara a EMT, pero si acabar con un modelo de precariedad que viene dándose desde 2003. Los trabajadores deberían estar en convenio de EMT Valencia y cobrar lo mismo que quienes realizan las mismas tareas” ha indicado Rabadán. Además, ha explicado que se ha solicitado a EMT el acta de infracción completa de Trabajo.
Hechos denunciados
Según ha explicado el secretario general de CGT en EMT de València, Gregorio Rabadán, han denunciado que “los trabajadores cedidos” realizaban sus servicios en los centros de trabajo de EMT junto a los trabajadores “oficiales” de la empresa municipal y la misma actividad bajo las órdenes “directas” de los encargados de EMT.
También explica que “realizan trabajos y funciones que no están descritos en los contratos, sin la formación adecuada en materia de prevención y riesgos laborales, a requerimiento de los encargados de EMT, utilizan las mismas herramientas y medios que los de EMT y tienen idéntico horario de descanso de bocadillo”.
Asimismo reclaman que las empresas Ballester y Covamur “no aportan autonomía técnica, ni valor añadido, sino solo mano de obra para realizar el trabajo de conductor de maniobras” y que “no tienen entre los propósitos de su actividad empresarial y laboral la conducción de vehículos para los que se necesite el permiso de conducción de la clase D”.
“No es la única investigación abierta”
Por otra parte el Partido Popular tras conocer el acta de Infracción de Trabajo ha abierto un expediente sancionador a la EMT y ha pedido al PSOE que sea “valiente” y apoye “al resto de grupos para apartar a Grezzi al frente de la EMT” por “su pésima gestión”.
El concejal del PP en el Ayuntamiento de València, Carlos Mundina, ha explicado que “no es la única investigación abierta” a la EMT y ha indicado que la Agencia Española de Protección de Datos también ha iniciado un expediente sancionador contra el servicio municipal por infracción en seguridad de datos en relación “a la estafa de 4 millones de euros de hace dos años”. “No se ha recuperado ni un solo euro ni han habido responsabilidades políticas” ha criticado Mudina.
Los populares valencianos también han lamentado que queda manifiesta la “reiterada falta de diligencias en la gestión de la entidad” y que “se hace caso omiso” a los informes como la Sindicatura de Comptes, la Agencia Valenciana Antifraude, la Intervención General Municipal, el Síndic de Greuges o el Consejo de Transparencia.
