El gobierno del Rialto reclamará responsabilidades a la empresa que ha rehabilitado el parque Gulliver de València tras los desperfectos surgidos que han provocado el cierre de dos toboganes tan solo un mes después de su reapertura. Así lo ha explicado el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, al ser preguntado por las “patologías” y grietas surgidas en el parque en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Locall
“Hemos pedido un informe técnico de explicación de que ha pasado y hemos exigido a la empresa constructora la reparación inmediata de todas las fisuras que han salido en algunos toboganes” ha manifestado el vicealcalde, que también ha señalado que “las patologías que han salido en el Gulliver no son razonables”, ya que no se corresponden con el uso normal de miles de usuarios o de enganches de cinturones.
“Como responsable de Jardinería Sostenible y del Organismo Autónomo de Parques y Jardines estoy muy disgustado. No voy a quitar importancia al hecho. Soy el primer sorprendido de que un mes después de reabrir el parque y de haber hecho una rehabilitación de un millón de euros se hayan producido algunos desperfectos en algunos toboganes” ha manifestado Campillo en un tono muy enfadado.
Del mismo modo, el vicealcalde ha manifestado que “vamos a exigir desde el gobierno municipal que aquello que hemos pagado con el dinero de todos los valencianos esté perfecto. No que esté bien, que esté perfecto para que dure otros 30 años más”. Aún así ha destacado la “profesionalidad” de la empresa encargada de la rehabilitación, Bertolín, que lleva décadas trabajando para el Ayuntamiento de València y varias administraciones.
De momento el parque no se ha cerrado por completo al público, solo algunas partes y toboganes, según ha explicado el titular de parques y jardines, aunque ha precisado que si que necesitará cerrarlo en las próximas semanas para “reparar algunas partes de la figura”.
“No estamos con la paleta arreglando el Gulliver”
Sobre las críticas del PP que han catalogado la reparación de “chapuza”, ha asegurado que “agradecería a la oposición que no hiciese demagogia porque ni el alcalde ni el vicealcalde estamos con la paleta arreglando el Gulliver. Nosotros encargamos las obras y luego las hace una empresa que tiene experiencia. Y si ha habido un problema en la ejecución de la obra la responsable es la empresa”. no fue por la pintura o un alergia en los niños, sino por el afloramiento de la fibra de vidrio. “El anterior gobierno estuvo 24 años y no hizo ninguna rehabilitación integral de una figura tan importante” ha concluido.
“La responsabilidad de un gobierno es exigir a la empresa que ejecuta las obras y a la dirección de obra que cumpla estrictamente el contrato. Eso es lo que estamos haciendo en este momento” ha precisado Campillo, que también ha querido aclarar que la anterior vez que se cerró al público
