Más de 334 toneladas de alimentos saldrán los próximos días del centro logístico de Vila-real, ubicado en las instalaciones de la Cooperativa Católico Agraria para ayudar a cerca de 8.000 personas en toda la provincia de Castelló.
Cruz Roja, iniciará así la segunda fase del reparto de víveres que realiza a través del Programa de Ayuda Alimentaria a las Personas Más Desfavorecidas (FEAD). Por eso, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha agradecido en nombre de toda la ciudad la colaboración entre Cruz Roja y la Cooperativa Católico Agraria para hacer posible que “Vila-real sea hoy la capital de la solidaridad en la provincia” a través de esta distribución que llega a las asociaciones que lo reparten en cada municipio.
A esta segunda fase del programa en la que Cruz Roja distribuirá en la provincia un total de 334.407 kilos/litros de alimentos entre 7.695 personas, que se suman a los 180.117 kilos entregados ya en el primer semestre del año.
10 años de la cesión de un espacio clave
Cruz Roja ha entregado un reconocimiento a la Cooperativa para agradecer los diez años de colaboración con la cesión de sus dependencias para poder desarrollar este programa de ayuda humanitaria, un período en el que se han distribuido más de 7.000 toneladas de alimentos por toda la provincia.
El presidente de la Cooperativa, Juanjo Ortells, el presidente provincial de Cruz Roja, Esteban Fortea, el alcalde de Vila-real, José Benlloch y la jefa de la Dependencia del Área de Agricultura y Pesca de la Subdelegación del Gobierno, Sara García, han destacado el trabajo de más de 200 voluntarios que trabajan en estas campañas de reparto desde Vila-real.
Benlloch ha asegurado que el reconocimiento a la solidaridad de la Cooperativa es “muy merecido” y ha recordado que “en 2011, cuando llegamos a la Alcaldía, en plena crisis económica, Cruz Roja nos trasladó sus dificultades para seguir costeando el alquiler de los locales en los que almacenaban estos alimentos, y de inmediato buscamos una solución cediendo el entonces Casal de Fiestas”.
Un año después, en 2012, la Cooperativa Católico Agraria de Vila-real ofreció sus instalaciones de manera gratuita para poder llevar a cabo este programa de distribución de alimentos y se inició una colaboración entre ambas entidades que se ha prolongado durante diez años y que “demuestra que cuando trabajamos todos juntos, las cosas salen mejor”, ha aseverado Benlloch.
El alcalde ha incidido en que esta cesión de las instalaciones “ha permitido que Cruz Roja pueda destinar sus fondos a ayudar a las personas que más lo necesitan” y en este sentido ha recordado que el Ayuntamiento de Vila-real también ha cedido las instalaciones del edificio de la antigua estación de la Panderola para la nueva sede de la asamblea local.
“Estamos ya a punto de inaugurar esta nueva sede, una infraestructura que era muy necesaria, y en la que el Ayuntamiento ha invertido 300.000 euros en un momento de muchas dificultades, pero que permitirá que Cruz Roja pueda desarrollar mejor su gran labor social y humanitaria”, incide Benlloch.
“Hoy Vila-real es la capital de la provincia en solidaridad, porque desde aquí se repartirán alimentos para toda la provincia, lo que demuestra que no nos olvidamos de quienes más lo necesitan”, ha asegurado el alcalde, quien ha recordado que la Cooperativa y Cruz Roja son “dos de las entidades más importantes de la alianza social que Vila-real ha construido, a través de 64 convenios a los que el Ayuntamiento destina casi tres millones de euros”.
Al respecto ha recordado que, además de Cruz Roja, otras tres entidades sociales de la ciudad –Cáritas, San Vicente de Paúl y Juventud Antoniana– “nos ayudan, en colaboración con los Servicios Sociales, a cuidar a más de 2.000 familias”, por lo que también les ha agradecido su trabajo.
Por su parte, el presidente de la Cooperativa, Juanjo Ortells, ha manifestado la satisfacción de la entidad por colaborar con Cruz Roja para hacer posible el reparto de alimentos. “Nos sentimos muy orgullosos de poder ayudar a toda la provincia y agradecemos el trabajo de Cruz Roja, en especial de los cerca de 200 voluntarios, porque sin ellos, la ayuda no podría llegar a quienes más lo necesitan”.
El presidente provincial de Cruz Roja, Esteban Fortea, ha explicado que el programa FEAD “contribuye a paliar una de las peores formas de pobreza” y ha entregado una placa en reconocimiento a la Cooperativa por estos diez años de colaboración, en los que se han repartido un total de 7.265 toneladas de alimentos.
