Medios aéreos y terrestres permanecen durante la mañana de hoy trabajando para controlar el incendio forestal declarado en Venta del Moro.
El incendio forestal declarado el pasado domingo por la tarde en Venta del Moro continúa quemando una gran masa boscosa en este paraje de la Plana d’Utiel-Requena, con unas condiciones meteorológicas donde el viento ha estado presente y está complicado la extinción.
Ayer por la tarde el fuego estaba estabilizado pero un repentino cambio de viento combinado con la baja humedad del entorno y las altas temperaturas reactivaron las llamas, que amenazan las Casas de Moya y las Hoces del Cabriel.
El incendio ya ha calcinado más mil hectáreas, cifra que lo convierte ya en el más grave de la temporada en la Comunitat Valenciana. Más de doscientas personas trabajan este martes sobre el terreno para tratar de apagar el fuego, según el Consorcio Provincial de Bomberos de València.
Se han desplazados en la zona para ayudar en la extinción recursos del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Castilla-La Mancha, que ha movilizado cinco aviones, y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Aunque todavía no se han tenido que hacer evacuaciones preventivas muchos vecinos de Casas de Moya han decidido abandonar sus casas por miedo.