La Asociación de Vecinos de Benimaclet ha vuelto a reclamar el soterramiento de la ronda Norte para tener un espacio de transición entre la ciudad y la huerta. Lo han hecho durante el taller participativo organizado por la Concejalía de Urbanismo dentro del proceso administrativo para la redacción Plan Especial de Benimaclet (área funcional 18).
Del mismo modo, también han reivindicado la reducción de la edificabilidad, una cuestión que preocupa a los vecinos y vecinas y que ha ocasionado varios enfrentamientos en el seno del gobierno del Rialto, pero que desde el departamento de Sandra Gómez aseguran que “es la misma que recoge el plan general”.
No obstante, este nuevo plan para el barrio, liderado por el arquitecto José María Ezquiaga, propone otras vías como pasos peatonales elevados o cambiar de ubicación los huertos urbanos hasta la antigua industria Lechera. Pero también incorporará los resultados del taller a la propuesta que se incluirá en la evaluación ambiental, paso previo a la exposición pública, para que se puedan presentar alegaciones.
Sin embargo, desde la entidad vecinal han expresado su “malestar” tras comprobar que el acto de este miércoles por la tarde “no ha cumplido la misión de lo que un verdadero taller participativo debe ser, o sea un espacio donde el vecindario y las diversas entidades cívicas puedan proponer y debatir las diversas opciones urbanísticas. Y eso no ha sido así”, apuntan.
‘Sin sitio para todos y sin debate vecinal’
En este sentido, aseguran que “no se admitió debatir ninguna propuesta planteada como el tema estrella para la asociación vecinal de la reducción de la edificabilidad. El equipo ponente ha venido a vender su producto, y no ha aceptado hablar de edificabilidad, ronda norte, transición huerta-ciudad”.
Igualmente, han criticado la encuesta web puesta en marcha por el Ayuntamiento porque no recoge las tres principales reivindicaciones vecinales: el soterramiento norte, los huertos urbanos y la reducción de la edificabilidad, así como porque “un proceso participativo no es que cualquier persona, viva donde viva, entre a una página web y exprese lo primero que se le ocurra”.
Además han señalado que el local elegido “no cumplía con el suficiente espacio de aforo para acoger un acto donde se supone que se iba a tratar el futuro urbanístico de todo un barrio, ya que más de cincuenta personas se quedaron en la calle sin poder entrar. ¿Quizá esa era la intención por parte de la concejalía organizadora?”.
Desde Cuidem Benimaclet también han mostrado su malestar por la falta de aforo y han criticado que un equipo “haya propuesto tres propuestas cerradas ni haber mirado antes las alternativas propuestas”. Por ello, “no nos creemos estos procesos cerrados y exigimos al Ayuntamiento que detenga la redacción del Plan hasta llegar a un acuerdo con los colectivos del barrio sobre las cuestiones urbanísticas estructurales que el instrumento del Plan Especial permite modificar: desclasificación, edificabilidad, huertos urbanos y patrimonio etnológico”.
“Llevamos años trabajando desde el barrio y para el barrio. No somos ingenuas ante esta gran mentira, por tanto, seguimos para reivindicar nuestra propuesta de Ara Benimaclet y la desclasificación, los espacios comunitarios y la agricultura de proximidad. Si se ponen de parte del interés económico y especulador, nos tendrán frente” concluyen.
Compromís critica el proceso participativo
Igualmente, la síndica de Compromís y número de la lista de Ribó a la Alcaldía, Papi Robles, ha expresado a través de su perfil de Twitter que “hay quien piensa que un proceso participativo es ir a decirle a la gente qué quieres hacer. En los tres que se han hecho de verdad en Benimaclet, ha quedado claro que queremos ser un barrio de huerta (no al lado de la huerta), ser pioneros en el uso de espacios comunitarios y que las promotoras no especulen“.
“Desde Compromís (y estamos abiertos a propuestas vecinales) queremos bajar la edificabilidad y, sin ese chantaje, conseguir igualmente las dotaciones que necesitamos y aumentar las zonas verdes. Ah y no queremos pasarelas que hagan de la ronda una autopista. Nosotros ya somos ciudad de 15 minutos” ha concluido.
Gómez asegura que “todas las voces serán escuchadas”
Por su parte, la vicealcaldesa y candidata socialista a la Alcaldía de València, Sandra Gómez, preguntada sobre el taller participativo y las criticas vecinales, ha asegurado que, “como alcaldesa, garantizará que todas las voces de Benimaclet cuenten y sean escuchadas. Todo el mundo debe tener claro que su opinión no vale más que otra y, por lo tanto, lo primero es que en cualquier proceso participación tiene que imperar el respeto porque la ciudad es diversa y cada uno quiere en su barrio una cosa”.
Gómez ha subrayado que en el futuro diseño “pueden caber todos los usos, pero lo que no puede haber es que haya voces que se quieran imponer a otras. En este sentido, sí que quiero garantizar a todos los vecinos y vecinas de Benimaclet que van a tener una alcaldesa con la que van a poder estar tranquilos porque va a garantizar que todas las voces y todas las posturas de Benimaclet sean escuchadas”, ha indicado.
Este taller que se ha realizado en Benimaclet tiene como “objetivo hacer partícipes a los vecinos y vecinas del barrio del documento urbanístico que tiene como objetivo convertir este espacio en un barrio de 15 minutos donde la ciudadanía disponga de todos los servicios de proximidad a una distancia máxima de 15 minutos a pie o en bicicleta. El Plan Especial contribuirá a reequipar el barrio con nuevas dotaciones, crear oportunidades laborales cerca de los residentes y mejorar la calidad del espacio público” ha explicado.
Una vez realizado el taller, ha confirmado la candidata socialista, se abrirá una consulta ciudadana para que los vecinos y vecinas puedan votar por la solución que crean más conveniente a cada uno de los temas propuestos. Esta votación se podrá llevar a cabo a través de la página web plaespecialbenimaclet.es, donde está a disposición de todas las vecinas y vecinos toda la información durante 15 días.
