Horas clave para el futuro de Almussafes y la industria valenciana del automóvil. Ford Almussafes está a tan solo 24 o 48 horas de saber cuál será el futuro de la planta de la Ribera. La multinacional decidirá esta semana entre Almussafes o Saourlouis y adjudicará a una de ellas los dos últimos vehículos eléctricos que están pendientes de asignar.
Es por ello, que más de 25.000 empleos directos e indirectos en la Comunitat Valenciana están pendientes de la decisión final que abocará a una de las plantas y a su industria auxiliar a un mar de incertidumbre. Más de 116 empresas del clúster de la automoción y que forman parte de la Asociación Valenciana de la Industria del Automóvil (AVIA) están siguiendo minuto a minuto el posible acuerdo porque su futuro también depende del mismo.
Todo apunta a que mañana podría ser el día clave, ya que según ha podido saber este periódico, la dirección de Ford ha enviado un correo a toda su plantilla y la ha convocado a una videollamada a las 9.05 horas (hora local de Detroit, sede central), 15.05 en España, para una reunión donde se abordará la transformación de la multinacional, y que justo coincide con los plazos que marcó la dirección. Por ello se espera que se anuncie la elección de la planta, sin embargo fuentes del sindicato UGT indican que el Comité de Empresa “por el momento no tiene confirmación oficial”.
Del mismo modo, a escasas horas o días de la decisión final de Ford Europa, según explican fuentes sindicales el ambiente en la planta valenciana es de “optimismo” aunque también de cierta “expectación” por ver cuál es la voluntad de la dirección. “Estamos esperando a que se pronuncien para poder ver el resultado del Acuerdo por la Electrificación, pero con optimismo” manifiestan desde UGT, el sindicato mayoritario.
Este Acuerdo que firmó el Comité de Empresa con la dirección europea el pasado mes de febrero para “intentar salvar el futuro de la planta valenciana” y que suponía “grandes esfuerzos” en materia laboral, contempla una contención salarial hasta 2027 y medidas de flexibilidad laboral como ampliación de la jornada en 15 minutos en el caso de que Detroit adjudique la producción de los nuevos vehículos, de lo contrario tan solo tendrá validez para el 2022.
Aunque en un primer momento, la plantilla acogió con desconfianza el acuerdo por los esfuerzos a futuro que debían implantar, fuentes de UGT señalan que “hay optimismo porque a medida que va pasando el tiempo la gente está poniendo en valor el acuerdo por la electrificación y piensan que es la mejor baza dentro de este proceso”. Tanto Almussafes como Saarlouis propusieron a la multinacional ajustes laborales, en el que caso de la factoría alemana supondría recorte para los más de 20.000 empleados de las tres plantas del país, así como una participación en inversión de los gobiernos de ambos países.
Esta sensación de positivismo también se debe en parte al futuro aterrizaje de la gigafactoría de baterías Volkswagen en la Comunitat, exactamente en Parc Sagunt II, a tan solo 60 kilómetros de Almussafes y que podría significar una futura alianza y colaboración entre ambas industrias, y que inclinaría la balanza de la pugna hacía el lado valenciano.
Además, hace una semanas la ministra de Industria, Reyes Maroto, aseguró que la propuesta de factoría de Almussafes era “una oferta ganadora” y que estaba convencida de que vendría a España porque “se dan las condiciones de liderazgo en un momento en que la Comunitat está liderando la electromovilidad no sólo en España sino en Europa”. “Nosotros hemos hecho un trabajo rigurososo para reforzar el acompañamiento de inversión que la planta necesita” afirmó.
“Ajustes sí o sí”
Sin embargo, tal y como anunció hace unas semanas el presidente de Ford Europa, Stuart Rowley, tanto la factoría de Almussafes como la de Saarlouis y sea cual sea la planta que reciba los nuevos modelos, deberán someterse a “un redimensionamiento de su estructura actual”, es decir, aplicar ajustes en materia laboral“, y que aunque una de las dos fábricas no sea elegida esto no significaría la decisión de cierre de la planta.
En este sentido, aseguró que “independientemente” de la planta que se seleccione en última instancia, esta no se trataría aún de una “decisión de inversión en producto” porque tras la la selección de la planta, “tendremos mucho trabajo por hacer para asegurar el producto para Europa”.
Y es que para la planta de la Ribera es vital ganar esta carrera por los coches eléctricos, ya que desde el pasado mes de marzo no fabrica el modelo Mondeo para el mercado europeo y a finales de año sucederá lo mismo con el Transit para el norteamericano, así como en 2023 para el cliente en Europa. Estas modificaciones también se producirán con los modelos Galaxy y S-Max, que se fabricarán hasta marzo de 2024 y así, la planta de Almussafes se dedicará únicamente a realizar el modelo Ford Kuga, que actualmente supone la mitad de la producción. Es por ello que la llegada de los modelos eléctricos es “la única salida” para asegurar el empleo a medio plazo.
